Descubre la Ermita de Santa Cruz en Fermoselle: historia, senderismo y miradores únicos
A las afueras de Fermoselle, uno de los pueblos más emblemáticos de la Ruta del Vino Arribes, se encuentra la Ermita de Santa Cruz en Fermoselle, también conocida como del Santo Cristo del Pino. Esta joya arquitectónica de origen visigótico y mozárabe, que data de los siglos XI al XIII, se alza en una colina con espectaculares vistas hacia la frontera portuguesa.
Este templo no solo destaca por su valor histórico, sino también por ser punto de partida de una de las rutas senderistas más recomendables de la zona. Desde la ermita parte un sendero de 1,3 km que discurre entre almendros y olivos hasta el Mirador de Las Escaleras, una auténtica atalaya sobre el río Duero. Este mirador ofrece una de las panorámicas más sobrecogedoras de los cañones fluviales de Arribes del Duero, una de las grandes riquezas naturales del parque.
Para quienes buscan una experiencia más completa, la ruta circular suma 10,28 km con un desnivel positivo de 355 m y dificultad moderada. El recorrido incluye paradas tan singulares como la Fuente del Penao, las ruinas del Castillo de Doña Urraca y un impresionante descenso hasta la orilla del Duero.
Además de su valor paisajístico y cultural, esta ruta es ideal para una excursión de medio día en familia. Recomendamos llevar calzado adecuado, agua y protección solar, especialmente en los meses más cálidos.
👉 Si te apasionan el senderismo, la historia y los paisajes de vértigo, la Ermita de Santa Cruz en Fermoselle es una parada imprescindible.
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